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Full text of "Que la Renta Básica de las iguales"

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Título: 



QUÉ ES LA RENTA BÁSICA DE LAS IGUALES 



Autoría: José Iglesias Fernández 
Manuel S. Bayona 
Óscar García Jurado 
Enrique García Escamllla 
Rosa Zafra Llzcano 

Editan: BALADRE - Coordinación estatal de luchas contra el paro, 
la pobreza y la exclusión social 
C/ Sant Bernat, 28 - Carcaixent (País Valencia) 
E-mail: baladre@coordlnacionbaladre.org 
www.coordlnacionbaladre.org 

ZAMBRA Iniciativas sociales 

C/Franc¡sco Cárter 1, 1 o , I a - 2901 1 Málaga 

E-mail: zambradlstrlbuidora@gmail.com 

zambradlstrl.blogspot.com 

asoclacionzambra.blogspot.com 



Impreso en GRÁFICAS DIGARZA 
Plaza de Los Ángeles, 3 29011 Málaga 
e-mail: graflcas@dlgarza.e. telefónica. es 

ISBN: 978-84-9398S3-1-8 
Depósito legal: MA-483-201 



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índice 



Presentación. Más de 20 años peleando por la RBis 7 

1 . El marco histórico 13 

2. Evolución del concepto 15 

3. El modelo fuerte como Renta Básica de las Iguales (RBis) 23 

4. La RBis no es una alternativa sino un instrumento 

para un proceso de cambio 25 

5. Otras reflexiones conceptuales 33 

6. La autonomía personal que supone el modelo fuerte 39 

7. Participación y movilización ciudadana 41 

8. Resumen 43 

Bibliografía Principal 45 

Anexo 1 . Segundo manifiesto de Barcelona sobre 

Renta Básica 47 

Anexo 2. De Dónde tomamos el nombre de RBis 49 



Dicen que dice la ley que somos ¡guales 
nadie te dirá en qué sitio, pues nadie lo sabe, 
dime, dime, ¿para quién hicieron la cárcel? 
porque el rico nunca entra y el pobre nunca sale. 
Dime quién decide aquí cómo hay que bailar 
que algunos siempre van palante 
y todos los demás siempre para atrás. 
Dicen que el que pide pan le suelen dar leña 
no te la puedes comer pero te calientas, 
si tienes frío y pides calor, te dan una mierda, 
no te vas a calentar pero te alimentas. 
Dime quién decide aquí cómo hay que bailar 
que algunos siempre van palante 
y todos los demás siempre para atrás. 
Dicen que dice la ley que somos iguales 
pero el rico nunca entra y el pobre nunca sale. 



L.P.R. Igual para todos 



Presentación 



Más de veinte años 
peleando por la RBis 

Manuel S. Bayona, Óscar García Jurado, 
Enrique García Escamilla y Rosa Zafra Lizcano 
(Gentes de Baladre y Zambra) 



Fue en 1985, tras finalizar el Encierro en la Iglesia de San Vicente en Gasteiz, 
cuando la Asamblea de Paradas de Gasteiz comenzábamos a hablar de exigir 
un INGRESO SOCIAL UNIVERSAL. Aquel encierro de tres meses fue un antes 
y un después en nuestras luchas. Desde noviembre de 1984 hasta el 3 de 
febrero de 1985 en aquella iglesia teníamos debates, lecturas y dábamos 
rienda suelta a como concretar nuestras luchas tras salir de allí. Raro era el 
día que no saliese el tema del Ingreso social universal'. En los años anteriores 
veníamos dándole muchísimas vueltas al tema y con el resto de las gentes, 
que desde 1982 llamamos Baladre, discutíamos lo mismo: la exigencia de un 
ingreso social universal, sin condiciones. 

Durante aquellos años, nuestras reflexiones eran muy incipientes, carga- 
das de dudas y de miedos, siempre evitando herir sensibilidades de sectores 
sindicales amigos. 

Pero durante los años 1985 y 1986 comenzamos los debates con otras 
gentes cercanas lanzando la propuesta en todas nuestras actividades. Fueron 
los años del reencuentro entre gentes y grupos de Baladre, en los que ya 
sabíamos lo que no deseábamos, como el hecho de reproducir lógicas de 
coordinadoras y propuestas posibilistas de enorme inmediatez. Ahora deseá- 
bamos asumir el proceso de nuestra COORDINACIÓN desde lógicas anticapi- 
talistas. Así es cómo cada vez más hablábamos del Ingreso Social Universal, 
negándonos a la lógica de luchar por cualquier empleo, en cualquier condi- 
ción, como centralidad ante la falta de recursos. 

Casi sin darnos cuenta durante la Huelga de Hambre de los trabajadores 
de Mercedes 2 , las gentes de Baladre pusimos mucha energía en ella, funda- 
mentalmente las compás de Gasteiz, incluso por momentos otras muchas. 
Pues sí, en aquella Huelga de Hambre ya hablábamos públicamente como 



7 



reivindicación importantísima de la RB 3 (Renta Básica, que entonces denomi- 
nábamos Ingreso Social Universal). Todo el año 1987 lo dedicamos a salir a la 
calle con la propuesta, confrontarla, ver las resistencias y reacciones de muchas 
gentes inquietas y amigas. 

Pero, un añito después (1988), en el Mikelin-88 en Abetxuko, discutimos 
con personas de Alemania sobre la RB. Ellas participaban en la BAG (Coordi- 
nadora de luchas contra la pobreza de Alemania). Aquella discusión nos llevó 
a viajar durante años 4 en más de 4 veces por año a encuentros con las compás 
de la BAG, y siempre estaba encima de la mesa, de las propuestas, las luchas la 
RB. Así sucedieron enredos múltiples con gentes de Holanda, Dinamarca, Italia, 
Francia, Bélgica, Austria, Suiza..., eran actividades que contaban siempre con 
las Gentes de Baladre, que éramos consideradas como unas más de la BAG 
alemana. Aquellos viajes eran momentos de gran aprendizaje colectivo, nos 
reforzaba como Coordinación, dándonos mucho sentido en nuestra lógica de 
apoyo mutuo. 

En los primeros años noventa estábamos como delegadas de redes euro- 
peas de Desempleadas y de Lucha contra la Pobreza. En Baladre procurábamos 
que nuestras presencias en esas redes nos sirvieran para mantener los enredos 
con las gentes de BAG y afines, a la vez que plantear marchas, concentracio- 
nes, actuaciones diferentes contra la U.E. 

De nuevo en Mikelin-92 en Abetxuko, hablamos como tema central el de 
la RB, pero entonces ya lo hacíamos desde una mayor confianza en nosotras 
mismas y en la propuesta, en el sentido transformador de la misma. 

En 1993 desarrollamos, las gentes de Baladre la Marcha contra el Paro y la 
Pobreza de Valencia a Madrid, donde entre las propuestas Baladrinas estaba la 
RB. Y en años sucesivos llevamos a diferentes foros (50 años Bastan en 1994 y 
Contra La U.E. del Capital en 1995) nuestra apreciada propuesta, convencidas 
de su importancia por la cantidad de debate/reflexión que genera y lo positivo 
que eso resulta para redefinir la vida. 

En 1997 las Jornadas de Economía Crítica de ese año se celebraron en 
Málaga y allí coincidimos con José Iglesias, Josep Manel Busqueta, Pere, ... per- 
sonas que participaban de las jornadas y que tenían asumida la propuesta de 
la Renta Básica (RB). De José habíamos leído sus textos sobre la Renta Básica, 
que fueron pioneros en el Estado Español, era una articulación de la propuesta 
sólida la que él planteaba (modelo fuerte de RB) y nosotras nos quedamos 
enamoradas en aquel encuentro. Coincidíamos en la intuición y en la reflexión, 



1 . Para nosotras lo que hoy conocemos como Renta Básica 

2. Fueron 32 días de huelga de hambre 

3. Renta Básica, que entonces denominábamos Ingreso Social Universal 

4. Aún seguimos haciéndolo pero con menor frecuencia 



8 



fue potentísimo, hasta el punto que seis meses después estábamos montando 
Jornadas sobre la RB juntas para articular lo que fue el I er Congreso sobre la RB 
en Barcelona en 1 998. Desde entonces las gentes de Baladre no hemos parado 
de sacar libros, artículos, estudios de viabilidad, seminarios de formación sobre 
la propuesta, programas de radio. Pero esto último es más conocido y no es 
necesario recordarlo. 

Lo que pretendemos con estas letras es reconocer aquella intuición de las 
gentes de Baladre en 1985, su recorrido en solitario durante años en la lucha 
por la RB y la importancia de la incorporación de José Iglesias a las gentes de 
Baladre. En 2001 afilamos aún más la propuesta, para marcar distancias y di- 
ferencias sobre Rentas Básicas débiles o debilitadas, para acuñar el termino de 
RENTA BÁSICA DE LAS IGUALES, que da nombre a este texto. No es un cam- 
bio semántico, es una propuesta diferente, anticapitalista, que busca ser una 
PROPUESTA-HERRAMIENTA que junto con otras nos ayude/sirva a transformar 
profundamente la sociedad actual. 

El texto que vais a leer a continuación es fruto del trabajo de muchas gentes 
de Baladre, dirigidas y coordinadas por el mayor entusiasta de la propuesta, 
José Iglesias Fernádez, que puso en negro sobre blanco todas nuestras reflexio- 
nes y que es quién más impulsa el debate y reflexión sobre ella entre las gentes 
de Baladre. 

Este es un texto, que se discutió en el Parlamento alemán hace cuatro 
años, que está traducido a múltiples y diferentes idiomas. Siendo la base de lo 
que está siendo la primera ILP por la RB en Extremadura. 

Esperamos que al igual que a nosotras nos está siento útil, lo sea para ti y 
que desde ya tengas a la RBis como una herramienta de lucha. 



9 



La Renta Básica de las iguales 



El intelectual que pretende que sus planteamientos sean aceptados 
por una sociedad represiva y autoritaria se convierte inmediatamente 
en un agente represor de la misma. Antonio Artero 



¡Cuidado! La RB no es ecléctica, como nos quieren convencer. 0 es 
un instrumento de transformación social, o lo es de Integración en 
los valores del sistema, acomodaticio con el poder; jamás debemos 
presentar la RB, y menos aceptarla, como una propuesta neutral. 
La limosna puede ser una RB; el modelo fuerte de RB, nunca. José 

Iglesias Fernández 



Los científicos nunca son neutrales, por lo que la ciencia que 
producen tampoco lo es. Emmanuel Wallerstein 



La vida sigue su curso 

un tiempo cruel y extraña, 

implacable y hermosa, 

alargando el pasado 

encogiendo el presente, 

repartiendo futuros inevitables, 

juntando y separando gente. 

Hoy es el futuro. 

Ahora es el futuro. 

Por eso la vida es agonía 

y la vivimos agónicamente. 

Hasta el momento incomparable, 

de la muerte. 

Solo tienes el presente. 

Cuídate! 

L.P.R. Hoy es el futuro 



1. El marco histórico 



En noviembre de 1998 se publicaba el libro La Economía crítica del bienes- 
tar, Volumen I dedicado al tema del Derecho ciudadano a la renta básica. Un 
objetivo de esta recopilación de artículos fue ofrecer una divulgación de los 
fundamentos más esenciales de la RB, a la vez que un método de análisis y 
una aplicación de aquellos conceptos que caracterizan la Economía crítica del 
bienestar. 

En un Volumen II, ya en la editorial, se pretende continuar utilizando la eco- 
nomía crítica del bienestar para defender la Renta Básica de las Iguales (RBis) 1 
de los ataques que está recibiendo. Además se añade el papel que podía jugar 
la RBis como instrumento para transformar esta sociedad en otra más pragmá- 
ticamente utópica. Simultáneamente, seguimos manteniendo una postura de 
defensa de los bienes y servicios que componen el modelo actual: pensiones, 
salud, educación, asistencia social, transporte, vivienda, etc. Y es que, desde las 
propuestas utópicas, se comprueba como una serie de temas relacionados con 
el bienestar de la población son derechos ciudadanos cubiertos directamente 
por el esfuerzo común (gasto social público) de la colectividad. En cambio, 
dentro de las sociedades capitalistas, los diferentes gobiernos neoliberales tie- 
nen como objetivo eliminar estos derechos y privatizar los bienes y servicios tan 
importantes para la ciudadanía. Por esta razón, en las denuncias y las luchas se 
intenta no descuidar estos frentes tan opuestos. 

Cuando comencé a publicar los primeros artículos sobre la RB, allá por 1994, 
las críticas a la misma venían de los laboriosos y productivistas a ultranza: su ¡dea 
de la vida humana era/es que el sudor de la frente es el que debe regir nuestras 
vidas; personas e instituciones para quienes la alienación y la explotación capita- 
lista pasaban/pasan a un segundo plano o eran/son consideradas irrelevantes. 

Desde entonces, han pasado 10 años, tiempo en el cual la idea y el trabajo 
de reflexión realizados sobre la RB da otra perspectiva, otro enfoque sobre el 
tema. Hemos pasado de una lectura convencional de la RB a desarrollar una 



13 



más crítica y más coherente con nuestro compromiso político y social; una lec- 
tura y un método que nos tiene siempre en proceso de revisión y cambio. Todas 
estas evoluciones hasta convertir la RB en la Renta básica de las Iguales, han 
provocado que, ahora, las críticas provengan precisamente de aquellos autores 
que siguen pegados a, y defendiendo una lectura de corte más asistencial y 
menos de aquella igualitarista. El antagonista está en nuestra propia casa: al- 
gunos conocen las reglas del debate y las aplican, con otros estamos a la espera 
de que las aprendan y las practiquen. 

¿Cuáles son los cambios teóricos y prácticos que he introducido como parte 
de mi bagaje de reflexión? A modo de resumen, los cambios fundamentales a 
tener en cuenta se concentran en dos grupos de aspectos que consideramos 
son inéditos. 



14 



2. Evolución del concepto 



2.1 ASPECTOS RELACIONADOS CON EL DESARROLLO TEÓRICO PARA CON- 
VERTIR LA RB EN LA "RENTA BÁSICA DE LAS IGUALES (RBIS)" 

En cuanto a la justificación ética, se ha iniciado e introducido las bases para una 
primera lectura anticapitalista de la RB (esencialmente Marx), en oposición a la 
tradicional o convencional, en el sentido liberal (Rawls) y propietarista (Nozick) 
que se venía haciendo hasta ahora. 

En cuanto al concepto, primero se explica el sentido económico del porqué 
debe traducirse como renta; y segundo, se ha ampliado para poder desarrollar 
por primera vez una tipología de la RB. A partir de ahora contamos con la 
distinción entre modelos fuertes y débiles. De aquí nace la necesidad de aban- 
donar el término de renta básica en singular (RB) y empezar a hablar de rentas 
básicas en plural (RBs). 

La elección de modelo supone un paso previo indispensable para abordar 
el tema de la financiación de la RB. Del modelo depende mucho quienes van 
a comenzar a percibir la RB, cómo, cuánto y cuándo. Sobre todo depende de 
si consideramos a la RB como un elemento para hacer justicia, o una medida 
para practicar la caridad pública; de si la contemplamos un fin en si misma, o 
un instrumento para la transformación social. 

La elección de modelo, fuerte o débil, también va permitir el poder explorar 
cuáles pueden ser los impactos de su implantación en el mercado de trabajo, 
en el sistema social público y en el modelo de desarrollo de la economía. Los 
modelos débiles apenas suponen una alteración de estos campos y, por eso, 
políticamente son más viables y atractivos para los partidos y algunas entidades 
benéficas. A la hora de elecciones, son más vendibles políticamente y apenas 
cuestan dinero. 

Toda esta reflexión permite aportar una explicación articulada de bastantes 
de los temas transversales relacionados con la RB: diseñamos un mapa donde 



15 



se pueden seguir las teorías de la justicia / injusticia, de los derechos humanos 
burgueses, de la fiscalidad, del sistema de relaciones laborales, de los sistemas de 
bienestar social, del modelo auto centrado de crecimiento económico y desarro- 
llo social; 2 o de temas como el de la pobreza, las mujeres, la inmigración, etc. 

Finalmente, esta lectura y utilización anticapitalista de la RB, esta concep- 
ción desde, con y para las gentes del pueblo, está incorporando, cada vez más, 
a colectivos y organizaciones de base, que ven en ella un instrumento idóneo 
para la transformación social. La RBis ya comienza a ser considerada como un 
patrimonio común de muchos de estos movimientos sociales. 

2.2 ASPECTOS RELACIONADOS CON EL DESARROLLO PRÁCTICO 

La importancia de introducir y disponer de los modelos es que permiten simular 
varios escenarios y hacer varios cálculos sobre la cuantía de la RB, así como 
sobre de las diversas fuentes de financiación que se pueden aplicar. Dentro de 
nuestra investigación, destacamos los siguientes aspectos: 

En el modelo de financiación que proponemos para la RBis, fundamentado 
éticamente sobre la doctrina de la justicia distributiva 3 , consideramos al Estado 
como el agente principal por excelencia para poder implementarlo. Los princi- 
pales instrumentos para cumplir esta función son precisamente la utilización de 
una política fiscal progresista y la reasignación del gasto público, donde, con 
un gobierno de corte liberal radical en el poder, podría primar la política social 
sobre la política de infraestructuras productivas. 

El método de cálculo utilizado es el Presupuestario, el cual se compone 
esencialmente de la política fiscal (ingresos) y de la política de la asignación 
(gastos) pública. 4 El presupuesto no sólo es ampliamente aplicado por los Esta- 
dos, sino que es el instrumento principal de las empresas, las entidades finan- 
cieras, e incluso de las asociaciones y las organizaciones sin ánimo de lucro. Este 
mecanismo contable permite al Estado elaborar los Presupuestos Generales y 
establecer un seguimiento real, una planificación y un control presupuestario a 
lo largo del ejercicio económico y fiscal; y a las empresas, bancos y asociaciones 
establecer una planificación por objetivos, y controlar las desviaciones reales 



2. También sirve para emplear en los modelos endógenos de desarrollo. 

3. El conocido principio de transferir de quien más renta tiene a quien más necesidades 
ha de cubrir. 

4. Empleamos el control presupuestario, o ciencia contable, por puro sentido práctico, y 
por homenaje a mi abuela, que contaba con los dedos. Me decía siempre: Neno, ¡xamáis 
descoides ás catro reglas! Y es que, digan lo que digan, la aritmética está en la base de 
toda la matemática. 



16 



que pueden ir apareciendo a corto, medio y largo plazo, según el horizonte 
de planificación que se establezca. Como decimos, este seguimiento tempo- 
ral permite a los gestores conocer las causas que provocan las desviaciones y 
actuar a su debido momento para corregirlas. En algunos casos, en los cuales 
las variables pueden ser tratadas como números índices, incluso los gestores 
y responsables pueden anticiparse a las circunstancias, introduciendo medidas 
que atenúen los efectos negativos, o reconduzcan los positivos. 

Utilizando este método para Catalunya, 5 ámbito de un estudio comunitario, 
se ha podido establecer y estimar un escenario con modelo fuerte, y varios es- 
cenarios con modelos débiles de RB. De haberse aplicado, hubiéramos podido 
estudiar puntualmente para cada uno de los colectivos que se sugieren en la 
descripción de la población las causas de las posibles desviaciones que hubie- 
ran podido surgir. Y, conocidas las causas, aplicar las políticas correctoras conse- 
cuentes. 6 Todo cuantificado hasta el último céntimo, con el mínimo de variables 
supuestas o estimadas. 7 Más tarde, a lo largo del 2003 y 2004, con un equipo 
formado por gentes de Baladre, 8 hemos podido aplicar esta metodología a los 
estudios que hicimos en las comunidades de Andalucía y Extremadura, sobre 
la posibilidad de sustituir la renta agraria que perciben los trabajadores y las 
trabajadoras del ámbito agrario eventuales y el correspondiente Acuerdo para el 
Empleo y la Protección Social Agraria (AEPSA), 9 por la RB en su versión de modelo 
fuerte o RBis. Con grupos de base, ahora nos encontramos haciendo un estudio 
en El Parke, financiado por el propio Ayuntamiento de Alfafar-Valencia, al igual 
que otros que ya se encuentran en proceso de comenzar, como los de las Islas 
Canarias y Galicia. 



5. Posteriormente, también lo hemos aplicado a los estudios para calcular el coste de 
sustituir la renta agraria que perciben los trabajadores eventuales agrícolas por la RB en 
las comunidades de Andalucía y Extremadura. 

6. El inconveniente de aplicar modelos econométricos es que se apoyan en supuestos y 
parámetros que no permiten estas actuaciones más concisas. 

7. Hemos de recordar que buena parte de las estadísticas oficiales, incluidas las que apa- 
recen muchas veces en los Presupuestos Generales del Estado, representan cantidades 
basadas en estimaciones, y no en datos reales. ¡Qué haya quién las santifica, esa es otra 
cuestión! 

8. Es el ámbito de encuentro de una gran variedad de personas, colectivos y movimientos 
sociales. Su nombre significa el de una flor, que es bonita pero venenosa. 

9. En el 2003, en su intento de eliminar el Plan de Empleo Agrario (PER) y el subsidio 
agrario, el gobierno del PP los ha sustituido por el Acuerdo para el Empleo y la Protección 
Social Agraria (AEPSA) y la renta agraria. "La nueva Renta Agraria sólo podrá solicitarse 
un máximo de seis convocatorias anuales mientras que el anterior Subsidio de Desem- 
pleo Agrario podía solicitarse todos los años. De esta forma, el subsidio deja de ser un de- 
recho permanente para pasar a tener un plazo de extinción o fecha de caducidad". Oscar 
García Jurado. En Vivir como quieras. Cuadernos renta básica. n° 6. noviembre 2004. 



17 



2.3 UN INCISO: ¡ ¡CUIDADO CON LAS EMBOSCADAS! I 

Hemos de advertir que, antes de emprender la lectura y estudio sobre la RBis, 
se debe evitar caer en las siguientes trampas: 

- La trampa de la definición. Si se quedase con la simple definición de 
que la RB es el derecho que tiene cada ciudadano/a a percibir una cantidad 
periódica para cubrir sus necesidades materiales, no descubriría el potencial re- 
volucionario que tiene como instrumento anticapitalista cuando desarrollamos 
la definición y la dotamos de unas características estructurales y políticas. De 
ser un modelo débil, caritativo, la RB pasa a convertirse en un modelo fuerte, 
de justicia distributiva. 

- La trampa de la identificación. Con la crisis de 1973, en la Europa de los 
países más ricos comenzó a hacerse crónicas cuatro de las peores adversidades 
sociales: una pobreza en torno al 20% de la población, una tasa de paro en 
torno al 11%, y un volumen de contratos precarios que oscila en una orquilla 
que va del 35 al 45 por ciento de la población ocupada; además nadie sabe la 
cantidad de personas que padecen marginación social. 10 Ante esta situación, 
resurge la propuesta de la RB. Pero, al basarse la defensa de la RB en estos pro- 
blemas sociales, el contra argumento para impedir este derecho ciudadano se 
hace contundente y difícil de replicar: argumentan que si se crea empleo estable 
y salarios 'justos', la RB es innecesaria. Estas tres realidades (pobreza, precariedad 
y marginación) relacionadas entre sí, no son más que los mecanismos externos 
que utiliza el capitalismo para limitar la libertad de las personas. Y es que, debajo 
de las tres situaciones de carencia, se oculta lo que E. Fromm argumenta extensa- 
mente en un capítulo que llama Los aspectos psicológicos del sueldo asegurado: 
"En la historia humana hasta el momento actual, el hombre ha visto limitada su 
libertad de actuar por obra de dos factores: el uso de la fuerza por los gobernan- 
tes (esencialmente su capacidad de matar a quienes se oponen), y lo más impor- 
tante, la amenaza del hambre contra quienes no están dispuestos a aceptar las 
condiciones de trabajo y de existencial social que se les imponen". 11 (p. 129) 

- La trampa de la justificación. Aquí, hemos de seguir una secuencia in- 
terpretativa. Primero, apoyándose en la propiedad privada, el capitalismo es un 
sistema que genera las adversidades mencionadas que padecen las poblacio- 
nes. Segundo, de acuerdo con las teorías de la justicia que utilizan los teóricos 
(Rawls y Nozick) de la lectura convencional de la RB, la propiedad privada es un 
bien primario que está por encima y tiene la prioridad lexicográfica sobre los 
demás bienes sociales; es decir, el elemento generador de las desigualdades es 



10. Marginación del sistema es un concepto estructural; exclusión de la sociedad es un 
concepto conductista. 

1 1. Eric Fromm. Sobre la desobediencia. Paidós. Barcelona 2004. 



18 



intocable. Por tanto, la propuesta de RB que proponen los teóricos convencio- 
nales se ajusta a estas prioridades; de aquí que no denuncien el sistema, no se 
muestran anticapitalistas. Tercero, como se impone tomar alguna medida social 
que pueda paliar tales problemas, hacen una peripecia justificativa, alegando 
que la autoestima rawlsiana, o el proviso de Locke que menciona Nozick, son 
bienes primarios de segundo orden que requieren una redistribución débil o ca- 
ritativa de la renta. Asi justifican la RB; no denuncian el carácter explotador del 
sistema, sino que proponen políticas distributivas del tipo limosna pública. Los 
modelos débiles, o renta básica de los parecidos, no pasa de ser una propuesta 
"pequeño-burguesa y oportunista, que tiene por objeto, o como consecuencia, 
suavizar los antagonismos de clase y de género". 

- La trampa de los modelos débiles. Como no podemos extendernos, decir 
sólo que definimos como modelos débiles de RB aquellos que violan alguna de 
las características estructurales del modelo fuerte de RB. Hemos de ser cons- 
cientes que los modelos débiles comienzan a proliferar a nivel de propuesta y, 
alguno, como el del País Vasco, ya alcanza el nivel de implantación. 12 Esta prolife- 
ración, debido al relajamiento e imprecisión del concepto, nos ha llevado a tener 
que distinguir entre la Renta Básica en singular, como hacíamos previamente, y 
utilizar otra más adecuada y actual, como es el de Rentas Básicas en plural. 13 A 
partir de ahora hay que pensar que no existe la RB, sino las RBs, y que hemos 
de tener bien claro por cual de los modelos nos decidimos, o desde que mode- 
lo nos hablan. Para no caer en la trampa de la imprecisión, o de la confusión 
ideológica, hemos de poder distinguir entre los modelos de justicia y anticapita- 
listas, de aquellos que son de corte liberal o asistencial. Ahora bien, los modelos 
débiles podemos considerarlos transitoriamente positivos cuando supongan un 
paso hacia la consolidación del modelo fuerte. Es decir, únicamente pueden ser 
aceptados siempre y cuando cumplan estas condiciones mínimas: 

- Han de ser concedidos individualmente a cada persona, por lo menos 
a partir de los 16 años. 

- No han de exigir ninguna contrapartida, tanto en términos de trabajo, 
como estudios, etc. 

- La cuantía a percibir ha de ser, por lo menos, igual a la determinada 
por el umbral de pobreza. 14 

- Y han de reconocer y estar encaminados hacia el modelo fuerte. 

Esto nos lleva a una nueva advertencia ante la lectura, ya que la liberación 
de todos estos cepos ideológicos y políticos se consigue, en la medida que 
adoptamos como mínimo, el modelo fuerte, o la que comenzamos a llamar la 
Renta básica de las iguales. Hemos dicho en otro libro anterior (b), y aquí lo vol- 
vemos a reafirmar que, ¿aportar una justificación para ir contra el capitalismo?, 
indispensable; ¿demostrar la idoneidad de la RB como instrumento para luchar 



19 



contra el capitalismo?, necesaria; ¿enredarse en una justificación de la RB para 
sostener el capitalismo?, irrelevante. 

Coincidiendo con este análisis, encontramos otro autor que se manifiesta 
en líneas similares, pero con respecto a la viabilidad: dice que la implantación 
de la renta básica "no exige previamente cálculos presupuestarios de factibi- 
lidad, pues se trata de utilizar un dispositivo de gestión socialdemócrata de la 
miseria, de un instrumento fundamental para debilitar la negociación colectiva; 
no de una protección verdadera y social contra el chantaje de la exclusión, 
sino de un freno para rebajar el coste de la mano de obra, pero también para 
implantar formas de trabajo de mierda". 15 

- La trampa ideológica y política. Juntando ambas conclusiones en una, 
vemos la trampa ideológica y política en que podríamos vernos envueltas; de 
hecho, como explicábamos anteriormente, nos ha costado mucho tiempo dar- 
nos cuenta de que estábamos cogidos de todos estos cepos: ¡Cuánto esfuerzo 
he dedicado a explicar la necesidad de justificar la RB cómo una propuesta 
ética, por una parte, y además económica, financiera y políticamente viable, 
por otra! 16 

2.4 PERO AHORA SE IMPONE DAR OTRO PASO ADELANTE 

Pienso que ha llegado el momento de proponer y dar un paso más dentro del 
proceso de desarrollo del tema de la RB. Pero antes, muy antes, lo que hay que 
hacer en este avance es repetir, dejar bien claro cual es el objetivo permanente 
del que arrancamos: nuestro compromiso, tanto político como ideológico, está 
por la transformación del sistema capitalista. Asegurarnos que nada, que nin- 
gún proyecto o propuesta nos ha de distraer en el camino de este empeño; más 



12. Este es un ejemplo hacia el que tenderán muchas Comunidades Autónomas. Anali- 
zado detenidamente, esta medida de ayuda a las rentas se aplica en muchas situaciones 
bajo el nombre de subsidio de paro no contributivo. En el Estado español, cerca de 
250.000 personas se benefician de este subsidio. 

13. Véase los dos estudios de José Iglesias Fernández que justifican la utilización de 
esta nueva tipología de la RB: Las Rentas Básicas: un modelo de implantación territorial. 
El Viejo Topo, junio del 2003 y La cultura de la rentas básicas. Virus editorial, julio del 
2004. 

14. El umbral de pobreza viene cuantificado por la mitad de la renta per capita del país 

15. Antonella Corsani y Maurizio Lazzarato. La renta garantizada como proceso consti- 
tuyente. Multitudes. 5/2/2005 

16. Por esta lectura anticapitalista que las gentes de Baladre hacemos de la RB, algunos 
destacados miembros de la Red Renta Básica (RRB) nos acusan de "simples"; a estos res- 
petables personajes, una propuesta como la que se hace en la Renta básica de los ¡gua- 
les, no les parece "sensatamente radical". Véase AA.VV. La Renda Básica de Ciutadania. 
Editorial Mediterránia. Barcelona 2005. 



20 



bien cuidar que todo lo que hacemos y pensamos certifica que nos movemos 
en esa dirección. 

Con esta referencia de fondo, y metidos ya en el proceso, lo primero que 
hemos iniciado ha sido un trabajo para hacer que el concepto (f) y el modelo (b 
y c) fuesen coherentes con una lectura anticapitalista de la RB. También hemos 
dejado claro lo difícil que es precisar cuándo y quién podría ser el precursor de 
este concepto; más bien hemos demostrado que nace como obra común de las 
miles de preocupaciones del ser humano por la justicia (d). 17 

Con esta labor hecha, lo que se impone ahora es establecer hacia dónde 
nos encaminamos, cuál ha de ser la referencia de nuestro modelo de sociedad. 
Porque en el proceso de desarrollo de la RB hemos dejado bien claro, y volve- 
remos a insistir, que ésta propuesta no contiene una organización social como 
meta, ni nueva ni vieja, y menos como alternativa, sino que es un instrumento 
idóneo para iniciar el proceso de transformación. Y es aquí donde la historia 
nos ayuda, donde nos descubre como muchos pensadores ya han realizado 
buena parte de esta labor, diseñando/soñando sociedades utópicas, lo que en 
términos genéricos podríamos definir como "la sociedad en la que el hombre 
ha alcanzado tal perfección que es capaz de construir un sistema social basado 
en la justicia, la razón y la solidaridad". 18 A nosotros nos toca poco más que 
reflexionar sobre ellas, valorarlas y ver que actualidad pueden tener, y en que 
sentido nos pueden ayudar a soñar un proyecto futuro hacia el que encami- 
narnos. 

Por tanto, ya sabemos que es lo que no queremos, e intuimos hacia dónde 
deseamos movernos. Pero, entre un punto y otro, ¿quién y cómo se ha de reco- 
rrer este espacio? Para ir debatiendo estas cuestiones, en el libro mencionado 
hemos incluido un resumen de aquellos modelos de utopía más representativos 
que se han escrito históricamente; también hemos añadido unas primeras re- 
flexiones sobre quién podría ser el sujeto social activo de la RB; hemos incorpo- 
rado unas primeras razones por las cuales no se ha de considerar a la RBis como 
una alternativa; y hemos agregado unas primeras llamadas a la necesidad de 
iniciar ámbitos de autonomía, como formas colectivas del sujeto activo, y de 
recuperar viejos sistemas de convivencia del comunalismo/comunismo primiti- 
vo (comunidades, colonias, comunas), estructuras que los sujetos sociales de 
cambio tendrán que adaptar y hacerlas operativas contra el sistema actual. 
Como un virus que acabe con el capitalismo definitivamente. Y a quien nos lea 
le toca el papel de juzgar que uso puede hacer de todo ello. 



17. Afirmar que no existe un pensador único responsable del concepto. 

18. Erich Fromm. "Prólogo a la edición inglesa de 1960", p. 19. En E. ESellamy. El año 
2000. Ediciones Abraxas. Barcelona 2000. 



21 



Aprieta el culo tío que empieza el baile, 

el gran hermano dice: ¡acojónate!, 

ya puedes olvidarte de ser distinto, 

la contraseña es obedecer. 

Seas yanki o mexicano, seas vasco o español, 

mafioso o vegetariano, izquierdista o esquirol, 

lo que importa no es tu raza, tu edad ni tu religión, 

lo importante es que todos viváis como pringaos, 

los pobres que nos invaden joderán tu identidad 

el gran hermano dice: ¡acojónate! 

De aquí no escapa nadie, ¡no huyáis cobardes! 

La contraseña es obedecer, 

seasyonki o marihuano, cocaíno, anfetamino, 

alcohólico, pastillero, drogadicto del seguro, 

estéis heridos o enfermos, seáis guapos 

o estéis muertos, 

lo que importa es que todos viváis colgaos. 

Con o sin enemigos, ¡viva el ejército!, 

el gran hermano dice: ¡acojónate! 

Todos llevamos dentro al policia-amigo, 

la contraseña es obedecer, 

seas ángel o demonio, chulo-putas o abogao, 

seas periodista o bobo, fracasado o triunfador, 

deberéis dinero al banco, bailaréis el bacalao 

vestiréis todos lo mismo, pensaréis todos igual. 

Aprieta el culo tío que empieza el baile, 

el gran hermano dice: ¡jode o jódete! 

L.P.R., Aprieta el culo 



3. El modelo fuerte como Renta 
Básica de las iguales (RBis) 



En la medida que iba desarrollando el modelo fuerte, por las características 
que se agregaba, la RB se iba transformando más y más en una prestación que 
consideraba a todas y cada una de las personas como ciudadanos y ciudadanas 
de igual derecho. 19 A lo largo del modelo, las peculiaridades que lo estructuran 
ponen el acento en: 

- INDIVIDUAL. Qué no es la familia, sino la persona individualmente (sujeto 
social pasivo) quien es el sujeto de este derecho. La persona como sujeto de la 
igualdad. 

- UNIVERSAL. Qué, además de ser no contributiva, es para todas y cada una 
de las personas sin que haya algún motivo que justifique ninguna exclusión. 
Igualdad de las personas ante las condiciones. 

- INCONDICIONAL. Qué, además de no estar sujeta al mercado de trabajo, 
el nivel de ingresos tampoco justifica ninguna discriminación. Igualdad del ciu- 
dadano ante las exigencias. 

- CUANTIA/EQUIDAD. Qué la cantidad a percibir será equitativamente la 
misma para todas las personas, con total independencia de la edad, los ingre- 
sos, el sexo, etc. Y la cuantía a percibir que proponemos como mínimo sea la 
definida por el Umbral de pobreza, equivalente al 50% de la renta per capita. 
Igualdad de la cuantía de renta a percibir. 

- FONDO SOCIAL Y SU ASIGNACIÓN. Qué, de la cantidad total de RBis 
que recibirá cada persona, un porcentaje de la misma irá a constituir el Fondo 
Renta Básica (FRB), el cuál se dedicará a financiar los bienes y servicios públicos. 
A la hora de distribuir la parte del FRB destinado a la mejora de estos bienes 



23 



y servicios públicos, todas las personas (sujeto social activo) tienen el mismo 
derecho a intervenir y decidir en los debates para tal asignación. Igualdad de 
participación y decisión en el Consejo por derecho de ciudadanía. 

- REFUNDICION. Qué la refundición, en su proceso de sustituir la mayoría 
de las prestaciones actuales por la RBis, acabará haciendo que todas las perso- 
nas disfruten uniformemente de este nuevo derecho. Igualdad equitativa. 

- DESDE LA BASE SOCIAL. Y qué la movilización por la consecución de la 
RBis, de abajo hacia arriba y no de arriba hacia abajo, se hace con la participa- 
ción de personas y movimientos sociales (sujeto social activo) en una relación 
de igualdad. 



19. Sócrates considera la hermandad como una relación entre personas ¡guales, en pie 
de igualdad. Véase La República. Platón, trabajo citado. 



24 



4. La RBis no es ninguna alternativa, 
sino un instrumento para un 
proceso de cambio 



"En primer lugar, creo que hay que rechazar de plano la pretensión de que es 
necesario disponer de una alternativa antes de criticar múltiples aspectos de 
esta sociedad, o toda ella... Criticar algo ya supone en parte una alternativa, 
pues implica que se preferiría otra manera de hacer las cosas... Sobre todo 
cuando se está enormemente alejado del poder y se sabe que, fuese cual fuere 
la alternativa propuesta, no tiene ninguna posibilidad de ser llevada a cabo en 
el corto plazo. [Es decir], no olvidemos que el tema de las alternativas está muy 
relacionado con el poder del que se dispone para realizarlas". 20 

Excelentes observaciones que hemos de tener en cuenta a la hora de abor- 
dar este tema, pero que, de todas formas, no deben suponer un obstáculo para 
Introducir unas primeras reflexiones sobre la distinción entre alternativas (o 
utop(as) y procesos de cambio; entre objetivos e instrumentos (o medios). 21 

No menos indispensable es dejar bien claro, cuando hablamos de alternati- 
vas, procesos e instrumentos, en donde filosófica y políticamente nos situamos. 
Ayuda cuando dialogamos a evaluar el alcance de las mismas y de quién las 
propone. Para dar ejemplo, podemos pensar, con Lenin, "que la humanidad 
no se verá liberada de las calamidades que la azotan actualmente con los es- 
fuerzos bien intencionados de algunas notables y nobles personalidades"; 22 
por tanto, nos oponemos a aquellas Iniciativas que únicamente tratan de pa- 
liar estos males o plagas. Tampoco estamos de acuerdo con las actividades 
caritativas que desempeñan miles de ONGs surgidas últimamente y que son 
financiadas por empresas, instituciones y gobiernos causantes de estos males. 
Emir Kusturica, conocido director de cine serbio, lo explica mejor: "en el nuevo 
orden capitalista, las guerras las financian las multinacionales, que pagan a los 
partidos y a los políticos para que las declaren. Quieren a las ONGs para lavar 
la sangre y las conciencias de los ciudadanos que votan a esos políticos que or- 
denan bombardeos. Las ONGs, financiadas por el capitalismo o sus gobiernos, 
recogen los heridos y son su coartada para ser políticamente correctos después 



25 



de lanzar bombas sobre niños y adultos en nombre de la democracia. Esas mul- 
tinacionales, y quienes les sirven para implantar el capitalismo global, acorralan 
a cualquier país que se atreva a tener una cultura propia, una identidad, un 
modo de organizarse diferente, una alternativa". 23 

Insistimos, ni unos ni otros quieren tomar conciencia de que, con sus ac- 
tividades, distraen a las clases empobrecidas de participar en la lucha contra 
el capitalismo. Y de que un proceso crítico no puede considerar la limosna, 
pública o privada, que practican estas instituciones, como un instrumento para 
la transición hacia cualquier utopía que pretenda ser una alternativa al modelo 
de sociedad capitalista. Es decir, ni son alternativas, ni forman parte de ningún 
proceso de trasformación social. 



4.1 LAS RENTAS BÁSICAS, ¿ALTERNATIVAS O INSTRUMENTOS? 

La propuesta de la RB nos puede servir de ejemplo de aplicación de las de- 
finiciones y los criterios introducidos para evaluar una propuesta social, 'una 
alternativa'. 

Según como se interprete, la RB presenta una doble dimensión: débil y 
fuerte. En los modelos que hemos tipificado como débiles, constituye un ins- 
trumento dentro del sistema; pero, adoptando una lectura antisistema 24 y el 
modelo fuerte o Renta básica de las iguales, puede convertirse en un instru- 
mento fuerte para luchar eficazmente contra el capitalismo global. Este doble 
carácter permite que los mismos elementos que hacen de la RB un instrumento 
dentro del sistema, puedan cambiarla en un instrumento idóneo para luchar 
contra el sistema. 



4.2 ELEMENTOS QUE HACEN DE LA RB UN INSTRUMENTO DÉBIL (DENTRO 
DEL) SISTEMA 25 

Es un mecanismo de redistribución de la renta. Este sistema contribuirá sig- 
nificativamente a redistribuir la renta más equitativamente, especialmente 
mejorando los ingresos de los estratos más pobres de la población, hoy fre- 
cuentemente alejados de los mecanismos de ayuda social. Aún teniendo en 
cuenta todas las dificultades existentes para abordar la penuria económica, 
la RB se enfrenta y va directamente contra la pobreza, siempre y cuando la 
cantidad que se establezca como RB sea igual a la considerada como umbral 
de pobreza. 

Da seguridad económica. Este derecho a la renta, y la correspondiente can- 
tidad que se asigne a la misma, supone un colchón económico que permite a 
la ciudadanía y a la clase trabajadora defenderse mejor de la contingencia de 



26 



un despido libre y gratuito, de la arbitrariedad y la incertidumbre que la patro- 
nal ejerce a través de los contratos temporales, de una mayor capacidad para 
negociar individual y colectivamente niveles salariales, condiciones de trabajo, 
vacaciones, horarios, movilidad funcional y geográfica, flexibilidad, etc. Buena 
parte de la economía sumergida se integraría en la formal, al perder esta la 
posibilidad de pagar salarios por debajo del umbral de pobreza, al no tener 
que pagar las cotizaciones a la Seguridad Social, y al incrementar la inspección 
contra el fraude fiscal. 

Se convierte en un fondo de resistencia para la lucha de clases. A su vez, 
a los sindicatos les daría un mayor poder para enfrentarse a la patronal, espe- 
cialmente cuando tuvieran que recurrir a la huelga, ya que la RB se convierte 
en estas situaciones de conflicto en un fondo de resistencia que puede utilizar 
cada trabajador contra el miedo al despido, al paro, a la pérdida de las remu- 
neraciones salariales. 

Permite iniciar otros modos de vida. La RB tiene como uno de sus aspectos 
positivos el que facilita oponerse frontalmente a todas las políticas de degrada- 
ción de las condiciones de vida, del aumento de las diferencias que impone la 
globalización económica y las políticas de la Unión Europea. En este sentido, es 
liberador proponer una medida que nos saque del salario del miedo, 26 en vez 
de aceptar las leyes de la Economía de Mercado con su aumento de la insegu- 
ridad y las diferencias sociales. Y no menos importante, la RB podría utilizarse 
como fondo de referencia desde donde comenzar otros ámbitos de autonomía 
individual y colectiva, ámbitos nuevos de consumo, en el sentido de vivir mejor 
con menos, de un consumo justo y solidario, de formas productivas colectivas 
dentro y al margen del mercado, etc. 



20. Miren Etxezarreta. "A vueltas con las alternativas". Artículo incluido en este número 
2 de Emergéncies. 

21 . Por ejemplo, hay quien piensa que la ciencia y la tecnología son instrumentos indis- 
pensables, no sólo para conocer la evolución de las sociedades, sino también como mo- 
tores para influir en el cambio social. Véase Xavier Duran. Las encrucijadas de la utopía. 
Editorial Labor. Barcelona 1993. 

22. VI. Lenin. Federico Engels. Marxist Internet Archive, 2000. 

23. La Vanguardia. 20 enero del 2005. 

24. Actualmente, existen dos lecturas sobre la RB: una convencional y otra crítica o 
anticapitalista. Para una explicación de ambas, véase José Iglesias Fernández, La Renda 
Básica a Catalunya. Fundació Jaume Bofill / Mediterránia. Barcelona 2002. 

25. La RB puede ser considerada un instrumento múltiple ya que aborda diversas pro- 
puestas sociales, todas ellas consideradas a su vez como reivindicaciones dentro del sis- 
tema. 

26. Miedo en el sentido de la dependencia de un ingreso, sea este el salario, la prestación 
de desempleo, el subsidio familiar, la renta mínima de inserción, contingencia a la que 
todas las personas no propietarias estamos sujetas. 



27 



Contribuye a luchar por la igualdad de género. Fomentar la igualdad de 
mujeres y hombres en el mercado de trabajo; el trabajo femenino podrá exigir 
que, a igual trabajo, igual salario; mano de obra masculina y femenina podrán 
negociar mejores salarios ante la proliferación de empleos de bajo coste. En 
el caso de las mujeres, éstas podrán enfrentarse a las relaciones patriarcales 
dentro de la familia en mejores condiciones económicas. 27 

Contribuye a eliminar los estigmas sociales. El hecho de refundir todas las 
prestaciones sociales en la RB permitiría eliminar el estigma de paro y su co- 
rrespondientes subsidios, el estigma de la pensión y sus correspondientes pres- 
taciones sociales, el estigma de la pobreza y sus correspondientes limosnas 
(públicas y privadas), y el estigma de la marginación, ayudando a afrontar la 
problemática que tropiezan las personas que salen de la cárcel y no encuentran 
empleo por su pasado de delincuencia, o de las personas que padecen dro- 
gadicción y que han de apelar al robo para poder comprar el estupefaciente 
y atender la compulsión que provoca la adición; es decir, los grupos más mal- 
tratados de la sociedad contarán con un seguro económico a partir del cual 
podrán rehacer sus vidas. 

Podemos subrayar que la RB se convierte ella misma en un pilar del nuevo 
sistema de bienestar para este nuevo milenio, nuevo en el sentido de que las 
prestaciones pasan a basarse en el concepto de ciudadano y no en la condición 
de trabajadores de la población. Consideramos que este nuevo derecho ciu- 
dadano a una renta básica contiene las virtudes y las características suficientes 
que lo hacen idóneo para establecer los fundamentos de un nuevo modelo de 
bienestar social público para el siglo XXI (Iglesias; 2000). 

La RB, incluso en sus fases de aplicación débil pero transitoria, siempre que 
no conlleve una contraprestación laboral, y seamos conscientes de que es una 
alternativa asistencial, puede facilitar la mejora y dignidad de la atención a 
ciertos colectivos. En estas condiciones, y con este grado de consciencia, esta 
característica ya justificaría el interés social por este nuevo derecho. 

En resumen, como instrumento para defenderse del deterioro de las con- 
diciones de vida que impone el capitalismo global, todas estas finalidades que 
persigue la RB suponen una contraofensiva idónea para contrarrestar las con- 
secuencias de los tres primeros frentes abiertos por la globalización capitalista: 
contra el poder que ejerce en el mercado de trabajo, la persona puede vivir 
sin pasar por el mismo; contra el desamparo social y la pobreza económica, el 
bienestar material queda asegurado, así como las distintas prestaciones socia- 
les; contra la pérdida de derechos, la RB es un derecho ciudadano que asegura 
los demás derechos sociales. De cara al sistema político, es un derecho ciuda- 
dano burgués más que se le ha de ganar al capitalismo. Pero también hemos 
de subrayar que la mayoría de ellas son alternativas débiles, que pueden ser 
fácilmente integradas dentro del sistema. 



28 



Recomendamos a quien nos lee que aplique este análisis a los instrumen- 
tos que hemos clasificado más arriba como débiles y que llegue a sus propias 
consideraciones: microcréditos, banca ética, comercio justo, programas de co- 
operación internacional, tasa Tobln, deuda externa, etc. 



4.3 ELEMENTOS QUE HACEN DE LA RB UN INSTRUMENTO CONTRA 
EL SISTEMA 

La rotura con la relación de clase como dominio para la sobrevivencia material. 
Ya hemos dicho que el origen del poder capitalista, del orden económico, so- 
cial, político y jurídico, hay que buscarlo en el modo de producción e intercam- 
bio del sistema capitalista: 

- "La concepción materialista de la historia comienza con el principio de 
que la producción, y con la producción el intercambio de mercancías, es la base 
de cada orden social; allá donde hay intercambio de mercancías, 28 la sociedad 
está forzosamente dividida en clases, y determinada por lo que y como se pro- 
duce e intercambia. Entonces, según este principio, las causas últimas de los 
cambios sociales y las revoluciones políticas, que originan nuevas relaciones de 
poder, hay que buscarlas no en la mente de las personas, en la eterna visión 
de la verdad y la justicia, sino en los cambios del modo de producción e inter- 
cambio; hay que buscarlas no en la filosofía, sino en la economía del período 
que se estudia". 

- "Las relaciones sociales nacen de la posición que las personas ocupan 
en el modo de producción. Con el desarrollo y la aparición de nuevas fuerzas 
productivas, las personas que trabajan también cambian, y con los cambios, 
asimismo se transforma el modo de producción, dando origen a un nuevo 
grupo de relaciones sociales". 29 

No hemos de olvidar la centralidad del trabajo en el mundo capitalista con- 
temporáneo. Es decir, una cosa es que "la sociedad del capital necesite menos 
del trabajo estable y cada vez más de las diversificadas formas de trabajo par- 
cial o part-time, 'tercerizado', que son, en escala creciente, parte constitutiva 



27. Javier Aguado. "La Renta Básica y el sistema patriarcal". Cuadernos renta básica. N° 
4. Barcelona 2002. 

28. Venta de la fuerza de trabajo a los capitalistas, y compra a los capitalistas de los bie- 
nes y servicios que cubren nuestras necesidades. 

29. Estas dos citas son de Karl Marx. Capital y tecnología: manuscritos inéditos (1861- 
1863). Terra Nova. México 1980. 



29 



del proceso de producción capitalista". [...] La "otra, muy diferente, es imagi- 
nar que, eliminando el trabajo vivo, el capital puede continuar reproduciéndo- 
se". 30 Por tanto, en el período de la globalización capitalista, el mero hecho de 
poder eludir la obligación de vender la fuerza de trabajo para intercambiarla 
por las mercancías necesarias para sobrevivir es comenzar por darle a la clase 
dominante un puntapié en el trasero, una patada a la base de su sistema de ex- 
plotación y de intercambio. El impacto de la RB en el mercado de trabajo puede 
alterar radicalmente las relaciones sociales de producción ya que permite a la 
población sobrevivir sin estar tan sometida al dominio del sistema productivo. 
Este es el sentido clave de la capacidad transformadora de la RB. 

A la vez permite iniciar procesos de producción, mediante actividades per- 
sonales y colectivas al margen de su sistema productivista y consumista. Todo 
esto facilita también construir un nuevo sistema de relaciones sociales, un siste- 
ma que vaya estableciendo las bases y la experiencia tan indispensable para di- 
señar sobre la realidad nuevos ámbitos de autonomía, vivencias independientes 
del sistema, esa sociedad utópica alternativa por la cual luchamos. A través de 
estas sucesivas transformaciones, quizás nos encontremos con el conocimiento 
suficiente como para elaborar esos planes globales que algunos reclaman. 

Todo esto nos permite comprender que la RB, para su financiación, puede 
partir de la doble premisa: de que los procesos de trabajo tienen un carác- 
ter global, y de que la producción de valor es social, no individual. No sólo 
produce valor una persona directamente ocupada durante su jornada laboral, 
sino que toda la producción es sistémica: la aplicación del conocimiento, por 
indirecta que parezca, está contribuyendo también a la generación de riqueza. 
Y la educación, salud, infraestructuras, tecnología, todos son elementos que 
contribuyen al proceso productivo. 31 Asimismo, otros aspectos impulsan el ci- 
clo del capital: desde el consumismo inducido por la publicidad, considerado 
normal, inevitable e incluso deseable por el sistema; pasando por el paro que 
infunde miedo a las personas con empleo facilitando la reducción de costes y el 
aumento del beneficio, y otros aspectos de índole colectiva; hasta la mejora de 
beneficios obtenida en detrimento de las condiciones de vida de las personas a 
todos los niveles. Incluso el inmenso gasto en mantener los aparatos políticos 
y militares que administran este orden y garantizan su continuidad. Por ello, 
en el capitalismo globalizado, los aumentos de riqueza no se deben redistribuir 
solamente mejorando los salarios y las condiciones laborales; es decir, reducien- 
do la jornada de trabajo o garantizando el pleno empleo. Si la producción de 
valor es social, la ¡dea de un modelo fuerte de RB va más allá de los avatares 



30. Ricardo Antunes. ¿Adiós al trabajo? Ediciones Herramienta. Buenos Aires 2003. 

31. Francisco José Martínez. "Fundamentos de la renta básica. Hacia un nuevo contrato 
social". Cuadernos renta básica. NT 0. Barcelona, noviembre de 1998. 



30 



del trabajo de cada individuo y es perfectamente posible. Su contenido permite 
neutralizar y contestar buena parte de las medidas tomadas contra quienes 
tienen empleo en particular, y contra todas las personas en general. 

Además de que el objetivo prioritario de la RB es la consecución de caminar 
hacia una sociedad justa, la RB supondría un incremento de la libertad real de 
las personas en el período de transición. En este sentido, tal y como señala P. 
Van Parijs, la persona "es realmente libre en oposición precisamente a ser for- 
malmente libre, en la medida en que se poseen los medios, no sólo el derecho 
para hacer cualquier cosa que uno pudiera querer hacer". 32 La RB asegura a las 
personas un mínimo de subsistencia que les permite elegir su forma de vida. 
Por tanto, constituye un avance de gran magnitud en el proceso hacia una so- 
ciedad más justa y equilibrada, dado que asegura la base material para poder 
disfrutar de todos los demás derechos humanos. 33 

Con todas estas observaciones, es difícil exagerar la importancia que pudie- 
ra tener una Renta básica de las ¡guales como el que propugnamos a favor de 
la creación de una genuina sociedad del bienestar para toda la población. 



32. Philippe Van Parijs. Libertad real para todos. Paidós. Madrid 1996. 

33. Véase "La RB y los derechos humanos" (Iglesias, 2001). 



31 



Para asegurarnos que nadie nos va a joder 
financiamos al gobierno y a la oposición, 
cualquiera que gobierne tendrá máximo interés 
en dejarnos robar en paz. 

Si alguno se pone chulo: golpe de estado, cambio de ley, 
con la banca no se juega, no se vacila con el poder. 
Pa que no digáis que despreciamos a la gente 
también los pobres tienen cuenta corriente, 
aunque tengáis poco sois millones de capullos 
y así va este chanchullo. 

Cobra tu nómina en nuestra entidad, hazte un seguro de viudedad, 

date un capricho con dinero rápido, sólo queremos verte feliz. 

Si alguno se pone chulo: golpe de estado, cambio de ley, 

con la banca no se juega, no se vacila con el poder. 

Si tu dinero es ilegal, máxima garantía, 

amor, drogas, prostitución, no tenemos manías. 

Nuestros son los medios de comunicación, 

nuestros son los medios que fabrican tu opinión, 

si buscas la justicia, vete a la ventanilla seis 

que allí te atiende el juez. 

i i Con nuestro fondo de pensiones 

acabarás recogiendo cartones!! 

Si alguno se pone chulo: golpe de estado, cambio de ley, 
con la banca no se juega, no se vacila con el poder. 



L.P.R. Sin escrúpulos 



5. Otras reflexiones conceptuales 



5.1 LEXICOGRAFÍA DE LAS RENTAS BÁSICAS 

Esto nos lleva a pensar en la necesidad de poder evaluar los diversos modelos 
de rentas básicas que se proponen. Y el criterio rawlsiano de lexicografía nos 
sirve de instrumento para ordenar jerárquicamente las diversas sugerencias de 
RB que van apareciendo en la arena social y política. Podríamos redefinir la pri- 
mera parte de la regla de prioridad rawlsiana 34 diciendo que los contenidos de 
la renta básica pueden ser clasificados en un orden lexicográfico. De acuerdo 
con esta norma podemos sostener: 

- Qué la Renta básica de las iguales, o modelo fuerte, se encontrará en 
un orden superior con respecto a los modelos débiles, siempre que cumpla 
con sus propias exigencias: la de mantener inalteradas las características es- 
tructurales de individualidad, universalidad e incondicionalidad; la de satisfacer 
que la cantidad a percibir sea, por lo menos a partir de la mitad de la renta 
per capita o umbral de pobreza; y la de asegurar que la justicia asignativa del 
fondo comunal sea decidida/compartida por quienes la perciben (democracia 
horizontal). Este modelo tiene mayor capacidad de respuesta, y da mejores 
resultados que los modelos débiles para leximizar la distribución de la renta 
entre la ciudadanía. 35 

- Mientras que los modelos débiles, o Rentas básicas de los parecidos, se 
encontrarán siempre serialmente en un orden inferior con respecto al modelo 
fuerte, debido a que no cumplen las exigencias que se le reclaman a este últi- 
mo modelo. Y cuánto menor sea el número de personas que entran a percibir 
la RB, o la cuantía que se les concede es menor que el umbral de pobreza, o 
mayor el número de limitaciones (restricciones) que se establecen como con- 
dición para percibirla, tales como la contraprestación, la edad, estar en paro, 
los ingresos personales o familiares, etc., más alejado estará jerárquicamente 



33 



el modelo débil en cuestión del orden superior; es decir, de la Renta básica de 
las ¡guales, norma o metro de la capacidad distributiva de los modelos débiles 
de RB. 

Por tanto, las diversas características que conforman la RBis tratan más 
equitativamente a las personas que los modelos débiles, hecho que demuestra, 
a su vez, su mayor importancia para distribuir bienestar y justicia social entre los 
mismos. También nos lleva a concluir que la RBis puede y debe ser considerado 
como un instrumento eficaz para iniciar la transformación hacia sociedades 
más igualitarias. 



5.2 RADICALISMO BURGUÉS 

Veremos más abajo como el socialismo, según Marx, no fue originariamente un 
movimiento para la abolición de la desigualdad económica, sino que su objeti- 
vo era esencialmente la emancipación del hombre, su restauración al individuo 
no alienado, disminuido, que entra en una nueva, rica y espontánea relación 
con su semejante y con la naturaleza. El objetivo del socialismo era que el 
hombre debía desprenderse de las cadenas que le ataban, de las ficciones y las 
irrealidades, y transformarse en un ser que puede hacer un uso creativo de sus 
poderes de pensar y sentir. Intentando mantener esta ¡dea socialista de Marx, 
nuestro trabajo con la RBis consiste en convertirla en un instrumento idóneo 
para abolir el capitalismo y caminar hacia esa emancipación del hombre. 

Sin embargo, consideradas cuidadosamente las teorías de la justicia men- 
cionadas, llegamos a la conclusión de que las mismas no buscan esta emanci- 
pación, ni tampoco el máximo de igualdad entre las personas, sino el que cada 
individuo disponga de, por lo menos, un mínimo de libertad. En consecuencia, 
lo que vienen a justificar las teorías de la justicia es la existencia de una desigual 
distribución de la libertad real entre todas. Desarrollemos el argumento: 

Tanto Rawls como Nozick identifican la libertad con la propiedad privada de la 
riqueza y la renta que estas generan: por el principio de igual libertad, Rawls es- 
tablece que el derecho a la propiedad privada es un derecho que está, en valores 
lexicográficos, por encima de todos los demás; y por el principio de apropiación 
originaria, Nozick establece que cada uno puede apropiarse de cuanta riqueza 
no haya pertenecido a nadie. Por tanto, en ambas teorías, quién más riqueza 



34. John Rawls. Teoría de la Justicia, p. 286. Fondo de Cultura Económica. Madrid 
1995. 

35. Equiparando renta con libertad, podríamos aplicar la expresión de P. Van Parijs dicien- 
do que el modelo fuerte leximiza la libertad real o, incluso, de manera más imprecisa, es 
aquel que da más libertad real a todos, p. 47. Libertad real para todos. Paidós. Barcelona 
1996. 



34 



propia tenga, mayor libertad disfruta. Como la riqueza privada no se puede dis- 
tribuir sin el consentimiento de quien tiene su propiedad, y este no va a autorizar 
un mayor reparto, a mayor desigualdad en la distribución de la propiedad mayor 
desigualdad en la distribución de la libertad, y menor igualdad social. 

Cierto que los autores contemplan la posibilidad de aplicar 'principios so- 
metidos' que impidan se dispare la tensión entre el objetivo primario, la li- 
bertad y el objetivo subsidiario, la igualdad; pero se trata de aplicar medidas 
menores, como el de favorecer a las personas desprotegidas (desiguales), me- 
diante políticas indirectas que favorezcan la igualdad de oportunidades. En 
el fondo y en la forma, las teorías de la justicia no cuestionan el origen de la 
riqueza productiva sino que, mediante los principios de diferencia y rectifica- 
ción, proponen la distribución de una pequeña parte de la renta que genera; 
no tocan la propiedad ni proponen la distribución de la riqueza, o libertad, sino 
la distribución de la renta, o acceso a la posibilidad de una cierta Renta básica 
entre los parecidos. 36 

Veamos un caso que ilustra esta situación. Para el 2002, el salario medio 
en el estado español era aproximadamente de unos 19.220 euros anuales, 37 
mientras que las remuneraciones que declaraban ganar anualmente los seño- 
res Francisco González, presidente del BBVA, y Alfredo Sáez, vicepresidente y 
consejero del BSCH, son de 3.600.000 euros y 6.250.000 respectivamente. 38 Es 
obvio que estos niveles de riqueza y rentas privadas desiguales tienen que esta- 
blecer, por jerarquía de valores lexicográficos, grados de libertad desiguales; es 
decir, la autonomía que les da el ganar 187 y 325 veces más que las personas 
que tienen un empleo medio tiene que permitir a los señores banqueros otros 
tantos grados de libertad más que a las personas asalariadas. Una realidad de 
poder cuya tendencia, encima, va en aumento. 39 

Y para que no nos acusen de parcialidad con estos argumentos, pienso que 
no está de más añadirles otra critica, esta vez hecha por un autor cercano a la 
propia cantera de la RB débil, una lectura desde el pensamiento socialdemó- 



36. Otro autor abordará esta pequeña cantidad de la renta a distribuir mediante un mo- 
delo económico en el cual el crecimiento satisfaga la cobertura incondicional de las nece- 
sidades mínimas sin alterar el escenario de una distribución en situación de abundancia 
débil. Véase Robert J. van de Veen. "From contribution to needs: A normative-economic 
essay on the transiten towards full communism", p. 478. Acta Política. No. 18, 1984. 

37. "Las diferencias salariales". La Vanguardia. 6 junio del 2005. 

38. Iñigo de Barrón. "Emilio Botín ganó 2,75 millones en 2004, un 31% menos que 
Francisco González". El País. 21 abril del 2005. Nuria Almiron. Juicio al poder: el pulso de 
la justicia con el BSCH. Temas de Hoy. Madrid 2003. 

39. Otro ejemplo de la concentración de riqueza y poder nos la ofrece Jack Trout, asesor 
del Departamento de Estado durante el gobierno de Clinton; este personaje asegura que 
"España la controlan cuatro familias". La Vanguardia, 8 junio del 2005. 



35 



crata. En "¿Libertad Real Para Todos?", 40 lan Gough deja bien clara la Inten- 
cionalidad de quienes defienden de la Renta Básica liberal. Sobre la propuesta 
más concreta e influyente, como es la de Van Parijs, comenta lo siguiente: "la 
libertad real para todos... [que propone este autor] está diseñada para salvar al 
'modelo europeo' de capitalismo, llevándolo a una nueva etapa..., su apoyo 
al capitalismo de ingreso básico tiene algo en común con mi defensa (la que 
propone el propio Gough) del 'capitalismo soclalmente regulado'..., el capita- 
lismo brinda un marco socio-económico más favorable que el socialismo para 
conseguir un ingreso básico alto y así maximizar la libertad real para todos..., 
la lucha por el socialismo es una calle sin salida, mientras que la lucha por el ca- 
pitalismo de Ingreso básico tiene todo por ganar..., y el enfoque de Van Parijs 
[apoyado en Paine] 41 se acerca al de Rawls, como en varias ocasiones él mismo 
reconoce su influencia". (pp. 267-277) Y otra segunda evaluación, esta de Ca- 
llinicos, autor no liberal, que, aún pretendiendo combinar los "conceptos filo- 
sóficos" (Ralws) y las "estructuras socioeconómicas" (Marx) para "considerar 
la cuestión de la igualdad y la desigualdad", no por ello no deja de manifestar 
que existe una "contradicción [en] las pretensiones normativas del liberalismo 
Igualitario, que ni desafian directamente a las instituciones capitalistas, ni a la 
perdurabilidad de esas Instituciones". 42 

Suponemos que queda bien evidente que los modelos débiles de RB poco 
o nada tienen que ver con el modelo fuerte o RBIs: digamos que los unos están 
pensados para defender al individuo burgués y al capitalismo (de renta básica o 
de regulación), mientras que el fuerte lo diseñamos contra el capitalismo como 
sistema (funcione este con renta básica débil o regulado estatalmente). De 
hecho, J. Harrlnghton nos aconseja que, "dentro de una república, no son las 
riquezas de los hombres como particulares [lo que ha de preocuparnos], sino 
las riquezas de la república; porque igualdad de bienes es causa de igualdad 
de poder e igualdad de poder es libertad no sólo de la república, sino de los 
hombres todos". 43 

Concluimos. "Cuanto mayor es la desigualdad, mayor es la concentración 
de poder". 44 O, a propiedad desigual, legitimada por las teorías de la justicia, 
libertad desigual. Y como no está autorizado tocar la distribución de la pro- 
piedad privada, tampoco se puede ir más allá de una desigual distribución de 
la libertad real entre todas. Por tanto, digamos que los modelos débiles de RB 



40. lan Gough. Capital global, necesidades básicas y políticas sociales. Miño y Dávila 
editores. Buenos Aires 2003. 

41. Thomas Paine (1737-1809), teniendo en cuenta su época, habría que considerarlo 
como un liberal radical. 

42. Alex Callinicos. Igualdad, pp. 29-31 . Siglo XXI, Madrid 2003. 

43. James Harringhton. La república de Océana. FCE. México 1987. 

44. Alex Callinicos. p. 47, trabajo citado. 



36 



están inspirados por un radicalismo burgués, aunque nadie se atreva a califi- 
carlos de esta manera tan contundente. El modelo fuerte busca construir una 
sociedad de iguales, mientras que los modelos débiles buscan mantener una 
sociedad de parecidos. Para quienes tenemos como primer objetivo la transfor- 
mación del capitalismo, no podemos esperar de ellos que sean instrumentos de 
emancipación del hombre que persigue el socialismo. 

5.3 DISTRIBUCIÓN EQUITATIVA DE LA IGUALDAD REAL ENTRE TODAS 
LAS PERSONAS 

Es obvio que los seres humanos somos muy diferentes entre nosotros por 
motivos de raza, etnia, color, cultura, sexo, edad, capacidad y habilidad para 
aprender, lo mismo que disponemos de diferentes niveles de riqueza, renta, 
oportunidades, derechos, etc. Entonces, siendo tan diferentes, ¿qué sentido 
tiene exigir el derecho a una Renta básica de las iguales? Precisamente, a pesar 
de, o respetando toda esta inmensa gama de diferencias, nada de ello implica 
que no podamos vivir en una sociedad de ¡guales, y que, como camino hacia 
ella, comencemos a practicar dentro del capitalismo de este valor futuro. Ahora 
bien, repito, siendo tan diferentes, ¿cuáles son los motivos para justificar el por 
que de la igualdad, y especificar en que hemos de ser iguales? 45 Uno de los 
objetivos centrales de este libro será presentar propuestas utópicas que respon- 
dan a ambas cuestiones: tanto a las razones del porque ha de haber igualdad 
entre las personas, como el de ser iguales ante los medios y los recursos pro- 
ductivos (riqueza), el acceso a las mercancías que se producen para satisfacer 
las necesidades materiales (renta y consumo), la gestión de la cosa pública, la 
justicia, etc. 



45. Amartya Sen establece estas dos cuestiones para el debate sobre la igualdad. Inequa- 
lity Reexamined. Oxford 1 992. Mencionado por A. Callinicos. Trabajo citado. 



37 



La miseria feroz ha tomado las calles, la avaricia se folla a la libertad 
los débiles gimen mientras los aplastan, sus quejas son olvidadas. 
Estamos saliendo de la situación y vamos a darle pronta solución, 
y ahora yo me doy la vuelta, 
y al salir cerrar la puerta. 

¿Qué podemos decir?, dice la mayoría, así es la vida, 
¿qué le vamos a hacer si no hay solución?, asi es la vida, 
no queremos saber, no hay ninguna salida, así es la vida, 
a ver que dice el de arriba. 

Un poco de calma, tan grave no es, hagan otro esfuerzo hasta fin de mes, 

mientras tanto yo contento, 

con mamar del presupuesto. 

Os jodeis y os calláis, asi es la vida, así es la vida, 

no sé de qué os quejáis, así es la vida, asi es la vida, 

¿qué cojones queréis?, asi es la vida, así es la vida, 

me estáis manchando la alfombra. 

Duro inconformista sin civilizar, ven a nuestros brazos, déjate domar, 
si eres joven y rebelde 
Coca-Cola te comprende. 

Y lo ricos se agrupan en la lucha final, asi es la vida, 

mientras van cantando su internacional, asi es la vida, 

le pasan a dios su tanto por ciento, asi es la vida, 

y el mundo es una bomba de tiempo, asi es la vida, 

así, así, asi es la vida, 

así, así, así es la vida, 

así es la vida, 

así es la vida, 

te puedes acatarrar. 

L.P.R. Así es la vida 



6. La autonomía personal que 
supone el modelo fuerte 



Decimos que, sobre el concepto de RB hemos tenido que desarrollar toda una 
tipología para disponer de una medida que nos permita evaluar si el modelo 
es anticapitalista, o nos propone la sumisión al sistema; en este momento ha 
proliferado una amplia gama de propuestas de ayuda social, casi todas encami- 
nadas a apoyar la familia, frecuentemente exigiendo contrapartidas, la mayoría 
limitadas a colectivos muy precarios, y casi todas con unas cantidades que 
rayan el mantenimiento de la mendicidad. 

Por esta razón, hemos clasificado las diversas prestaciones que aparecen 
propuestas como modelos fuertes y modelos débiles. El modelo fuerte, por sus 
características, nos asegura que es un instrumento idóneo para luchar contra 
el capitalismo. Su contenido conlleva justicia, porque es un mecanismo de re- 
distribución fuerte de la renta; 46 pero a su vez es anticapitalista porque permite 
eludir el mercado de trabajo, uno de los pilares de dominio y explotación de la 
población que es indispensable para el sistema. Además, la aparición dentro 
del Estado español de una red estructurada de forma jerárquica y elitista, con 
planteamientos técnico-posibilistas, y que desvirtúan el contenido del concep- 
to, nos ha llevado a reforzar la característica de que la RB ha de ser exigida des- 
de la movilización de la gente y los colectivos de base. Es decir, reivindicamos 
una RB que ha de ser conseguida por y con la voluntad de la ciudadanía, y no 
desde arriba, para la ciudadanía. 



46. La Red Renta Básica (RRB), en sus diferentes trabajos, recomienda que la cuantía de 
RB consista en una cantidad modesta, con lo cual la libertad real que 'disfrutará' el ciuda- 
dano tendrá que ser forzosamente muy modesta; es decir, con esta cuantía tan módica, 
¿qué autonomía o autoestima personal podrán disponer las personas? 



39 



Este sistema te da 
una oportunidad: 
desarroilarte según tu capital. 
Ya no hay esclavitud. 
Producir. 

Qué mundo tan feliz. 
Consumir. 

Es cojonudo que uno 
pueda decidir, 
dentro de un circulo 
y sin poder salir. 
Ya no hay esclavitud 
Producir. 

Qué mundo tan feliz 
Consumir. 

L.P.R. Capitalismo 



7. Participación y movilización 
ciudadana 



Todo cambio social debe arrancar desde abajo. Esto quiere decir que todo pro- 
ceso de transformación social ha de estar caracterizado por la movilización 
de la participación ciudadana. En este sentido, pienso que son de bastante 
actualidad algunas de las observaciones que establece P. Kropotkin sobre los 
posibles cambios sociales 47 : 

- Rechazo de la utilización de las instituciones parlamentarias y de cualquier 
otra organización representativa (desde arriba): "El socialismo, cualquiera que 
sea la forma que adopte en su evolución hacia el comunismo, necesita deter- 
minar su forma propia de organización; no debe de ninguna manera utilizar el 
gobierno representativo como un arma para la emancipación obrera (ciudada- 
na)... Jamás de tales elementos brotó revolución alguna, y si la clase trabajado- 
ra actual apelase a semejantes procedimientos, se vería condenada a no arribar 
a resultados de suficiente estabilidad... No tenemos fe en ninguna clase de 
gobierno, tanto provenga de la fuerza como del procedimiento electoral". 

- Participación y movilización ciudadana mediante la acción de los movi- 
mientos sociales (desde abajo): "El pueblo (la ciudadanía) habrá de empezar 
por sí mismo la labor constructiva, conforme a principios más o menos comu- 
nistas y sin esperar órdenes ni planes de lo alto... Ha de ser el pueblo (la ciuda- 
danía) quien levante el edificio de las nuevas e indispensables instituciones so- 
ciales". Lo que los movimientos sociales debemos y "podemos hacer respecto 
al futuro es precisar vagamente las tendencias esenciales y despejar el camino 
para su mejor y más rápido desenvolvimiento". 

- Con todo esto claro, se impone la creación de ámbitos de autonomía per- 
sonal y colectiva que, aún funcionando dentro del sistema, no se someten a la 
lógica de propiedad y acumulación del mismo. 

Por tanto, con todo lo argumentado, la RB puede ser un instrumento crucial 
de lucha contra el capitalismo global, por su capacidad de movilización y parti- 



41 



cipación ciudadana. En un momento como el actual, donde, tal y como analizá- 
bamos al inicio, la mayoría de los derechos y posibilidades para desarrollar una 
vida con dignidad se ven fuertemente agredidos y disminuidos, no cabe duda 
que la lucha por la implantación de la RB tiene la particularidad de poder articu- 
lar un proyecto político radical y común en términos de movilización ciudadana, 
que responda a los intereses materiales y sociales de colectivos y organizacio- 
nes muy diversas. Por su carácter transversal, la RB es un instrumento que tiene 
la ventaja y el atractivo de poder aglutinar a la mayoría de los movimientos 
que componen la izquierda: el movimiento sindicalista; el movimiento entorno 
a la economía social; el movimiento feminista; el movimiento ecologista; el 
movimiento okupa; el movimiento contra el paro, la pobreza y la marginación; 
los movimientos por la profundización democrática y los derechos humanos; 
el movimiento estudiantil; el movimiento antimilitarista; el movimiento en tor- 
no a papeles para todos, etc. Es decir, la RB aborda una multitud de intereses 
comunes, los cuales pueden servir como punto de partida para conseguir una 
serie de acuerdos y establecer una acción movilizadora conjunta, a través de 
la elaboración de un programa común de objetivos mínimos por la transfor- 
mación del sistema. La materialización de una movilización colectiva de esta 
envergadura es uno de los aspectos más importantes a destacar, y tendría que 
ser uno de los objetivos inmediatos a conseguir: "la potencialidad crítica para 
un cambio social se concentra más en la posibilidad de lanzar un movimiento 
social que en lo que el movimiento pueda conseguir... Para aquellas personas 
que están por la transformación de la sociedad han de ser más importantes 
los instrumentos de acción colectiva que se van consolidando que los propios 
resultados parciales que se vayan consiguiendo" (Robert Cox, citado en Iglesias 
1999). En estos momentos, en los que vivimos/ padecemos las consecuencias 
de la globalización capitalista, la izquierda no debiera menospreciar la fuerza 
subversiva que contiene la Renta básica de las iguales para luchar contra el 
poder del capitalismo. 



47. Citas tomadas de Irving L. Horowitz. Los anarquistas. 1 La Teoría, pp. 1 71-201 . Alian- 
za Editorial. Madrid 1975. 



42 



8. Resumen 



En Baladre, la visión que tenemos es que la RBis es un instrumento idóneo para 
la transformación del capitalismo. Persigue, eso sí, objetivos que pueden ser 
fagocitados por el sistema; pero, a su vez, contiene otros que son imposibles 
de integrar, como es el poder vivir al margen del sistema salarial, sin tener que 
pasar por el mercado de trabajo, una de las piedras angulares en la lucha de 
clases contra el capitalismo. Mejor; el hecho de que cada mujer, por ser una 
ciudadana y pueda disponer de una RB, supone otro de los elementos valiosos 
para luchar contra el dominio económico en las relaciones del sistema patriar- 
cal. El texto está lleno de más consideraciones y argumentos. De todas mane- 
ras, ¿no cabría la pena preguntarse, si no es esencial incorporar un instrumento 
de lucha que apuesta por: 

- Una mejor redistribución de la renta. 

- La erradicación de la pobreza. 

- Conseguir una seguridad económica que permita crear y organizar ámbi- 
tos de autonomía a la ciudadanía, tanto para luchar por una liberación de 
clase y género, como para iniciar nuevas actividades sin la presión de los 
mercados, especialmente el laboral. 

- Un mecanismo de participación ciudadana. 

- Un proceso liberador de tiempo, el cual poder dedicarlo a otras activida- 
des que no tengan que pasar necesariamente por el sistema de mercados. 

- Un proceso liberador a nivel personal, que lucha contra el individualismo 
que llevamos dentro y que no deja el florecimiento de la fraternidad huma- 
na, de la responsabilidad social, ante las necesidades que padecen nuestra 
conciudadanía. 



43 



"Señores diputados, la situación es 
extremadamente grave. 
Debemos hacer un consenso para 
meterlo dentro de un marco, 
¡Qué monada! 

Como primer punto del orden del día, 

actualizaremos nuestro sueldo. 

Como segundo punto 

bajaremos el de los demás. " 

Qué felices son haciendo el mamón, 

Siempre en nombre de la razón; 

Y su libertad vigilada por 

los cañones del capital. 

Estáis todos acojonaos por el ejército 

y vendidos a todos los banqueros, 

camuflando en democracia este fascismo. 

Porque aquí siempre mandan los mismos. 

Un congreso de ratones podíais formar. 

No representáis a nadie. 

¿Qué os creéis? ¿A quién queréis engañar? 

Quiero soberanía personal, 

mi representación soy sólo yo 

y nada me puede obligar 

con vuestra constitución. 

L.P.R. Congreso de ratones 



Bibliografía principal 



- José Iglesias Fernández. (1998) El derecho ciudadano a la renta básica. Libros 
de La catarata. Madrid 

- José Iglesias Fernández. (1999) La pesadilla del sueño americano: pobres en- 
tre los más ricos. En Viaje al corazón de la bestia (1). Virus editorial. Barcelona 

- José Iglesias Fernández. (2002) La Renda Básica a Catalunya. Editorial Medl- 
terránla. Barcelona Versión en catalán. 

- José Iglesias Fernández (2003). Las Rentas Básicas: el modelo fuerte de im- 
plantación territorial. El Viejo Topo. Barcelona Versión en castellano. 

- José Iglesias Fernández. (2004). La cultura de las rentas básicas. Virus edito- 
rial. Barcelona 

- José Iglesias Fernández. (2005). ¿Hay alternativas al capitalismo? La Renta 
Básica de los iguales. Baladre/Zambra Xátlva 2006. 

- José Iglesias Fernández y otros (2000) Introducción. En Ante la falta de dere- 
chos, ¡¡Renta Básica, YA!! Virus editorial. Barcelona 

- José Iglesias Fernández y otros (2001). Todo sobre la Renta Básica, volumen 
1 . Virus editorial. Barcelona 

- José Iglesias Fernández. (2000) Introducción a los principios, conceptos, teo- 
rías y argumentos. En Todo sobre la Renta Básica, volumen 1 (3). Virus editorial. 
Barcelona (a, b, c) 

- José Iglesias Fernández (2004). La renta básica del siglo XXI. En Todo sobre la 
Renta Básica, volumen 2 (4). Virus editorial. Barcelona (a, b, c) 

- José Iglesias Fernández y otros (2005). La renta básica del siglo XXI. En Todo 
sobre la Renta Básica, vol. 2. Virus editorial. Barcelona 

- José Iglesias Fernández y otros (2005). Vivir dónde quieras: del PER a la Renta 
Básica en el medio rural de Extremadura. FIM. Badajoz. 

- José Iglesias Fernández y otros (2005). Vivir dónde quieras: del PER a la Renta 
Básica en el medio rural de Andalucía. Zambra/Baladre. Málaga. 

(Muchos de los temas tratados se pueden encontrar en Cuadernos renta bási- 
ca. Números publicados del 0 al 10) 



45 



Otros autores: 



(1) Ramón Fernández Duran, Agustín Moran, Sara Nieto, La Polla (LPR), Manolo 
Sáez Bayona. 

(2) Tomás Etxabe, FJ Martínez, Agustín Moran, D. Raventós, P. van Parijs, La 
Polla (LPR), Manolo Sáez Bayona. 

(3) Josep Manel Busqueta, La Polla (LPR), Manolo Sáez Bayona. 

(4) Josep Manel Busqueta, David Muñoz, Kaótiko, Manolo Sáez Bayona. 



46 



Anexo 1. 
Segundo Manifiesto de Barcelona 
sobre la Renta Básica 



Donde mejor se puede entender el contenido del modelo fuerte o Renta 
básica de los ¡guales es en el Segundo Manifiesto sobre la Renta Básica. Desde 
que se aprobó el Primer Manifiesto, 48 han pasado ya casi cinco años. Durante 
este tiempo, la actividad encaminada a divulgar la RB ha sido trepidante. Hoy 
en día, son muchos los colectivos que la han adoptado genuinamente, otros 
sólo la conocen confusamente, e incluso algunos partidos la han convertido 
últimamente en eslogan electoral. 

El concepto de RB que se adoptó en el Primer Manifiesto, y que es el que 
más se ha divulgado en los círculos convencionales, se apoya en una filosofía 
muy conservadora de la sociedad; es decir, tanto el concepto (foráneo) como la 
justificación ética (liberal) que utilizan las asociaciones no adheridas a Baladre, 
no se corresponden en absoluto con el paradigma y la ¡dea de justicia de nues- 
tro compromiso social. Se entiende su amplia divulgación entre estas organiza- 
ciones porque responde totalmente a la concepción asistencialista que tienen, 
mucho más en consonancia con su credo y su práctica social. Precisamente, 
una de las ambigüedades respetadas en el primer documento es que la Asam- 
blea realizada en aquel momento, dejó abierto el que cada grupo asistente 
pudiera utilizar libremente nombres tan contradictorios, pero que respondían 
a los diferentes credos de estas organizaciones, tales como "ingreso universal, 
ingreso incondicional, subsidio universal garantizado, dividendo social, ingreso 
social, salario social, ingreso básico", etc. 49 

Para ser consecuentes con nuestra forma de pensar, se imponía la necesi- 
dad de encontrar una definición y una justificación que responda más a nuestra 
posición política anticapitalista. Es decir, hemos llegado a un punto de madurez 
que nos exige un discurso propio que nos permita abandonar lo foráneo y li- 
beral y sustituirlo por una lectura y un modelo anticapitalista de RB. La RB hay 
que convertirla en un instrumento de transformación de la sociedad que esté, 
a su vez, en consonancia con nuestra filosofía. 



47 



Afortunadamente, sobre la filosofía anticapitalista contamos con diversas 
corrientes históricas que nos ayudan a condenar la perversidad de este sistema: 
desde las múltiples tendencias anarquistas, hasta las socialistas y comunistas. 
A su vez, son muchos los pensadores, clásicos y modernos, que nos ofrecen 
análisis excepcionales actualizados sobre la naturaleza y la lógica de acumula- 
ción del sistema capitalista. Es una riqueza intelectual que está al alcance de 
todos nosotros. 



48. Aprobado en las "Primeras Jornadas sobre la Renta Básica". Barcelona, noviembre de 
1998. Cuaderno renta básica. N° 0. 

49. Véase el esfuerzo teórico realizado para demostrar por qué hay que definir este con- 
cepto como renta básica y abandonar los otros términos sí queremos ser consecuentes 
con una posición anticapitalista. En José Iglesias Fernández (ed.). Ante la falta de dere- 
chos, Renta Básica ¡¡YA!!, Virus editorial. Barcelona 



48 



Anexo 2. 
De dónde tomamos el 
nombre de RBis 



Rebautizamos el modelo fuerte con el nombre de Renta básica de las ¡guales 
(RBis) en honor a Francois Noel Babeuf (1 760-1 797) teórico radical y revolucio- 
nario republicano francés, que pasó la mayoría de sus años adultos perseguido, 
encarcelado, y que moriría ejecutado en la guillotina en Vendóme, por desarro- 
llar y mantener sus ideas de justicia. 

Como teórico, comenzó proponiendo una reforma fiscal igualitaria, un Ca- 
tastro perpetuo (1789) en el que defendía las comunidades campesinas contra 
los señores feudales. Y continuó dedicándose a la denuncia del orden social 
existente, que permitía la acumulación ¡limitada de riquezas, y por tanto, iba 
contra la ley natural de la igualdad. Poco después publicaría El manifiesto de 
los plebeyos (1 795) en su periódico El Tribuno del Pueblo, del que era director. 
Es el espíritu de justicia que se desprende de esta declaración el que inspira e 
impregna la filosofía que me motiva en la redacción de la Renta básica de las 
iguales. De aquí que tome su nombre. 

Como revolucionario, desarrolló una técnica insurreccional, basada en una 
preparación muy cuidada de toda la operación como una acción militar a car- 
go de un grupo clandestino de activistas comprometidos, la Conspiración de 
los iguales (1796), que en un momento dado habían de tomar la dirección de 
masas; los iguales se organizaron en células independientes entre sí, cuyos 
miembros desconocían a los de otras células. Otra contribución consistió en 
proponer que la tarea de transformar la sociedad sólo podía ser llevada a cabo 
por una dictadura revolucionaria, provisional, hasta que se llegase a una autén- 
tica situación de igualdad. 50 



50. Fernando Prieto. La Revolución Francesa, Editorial Istmo. En http://ateneovirtual.alas- 
barricadas.org/his. 



49 



Otros títulos publicados por Baladre y Zambra sobre la RBis: 



illgu 

atternativas^ HAY ALTERNATIVAS AL CAPITALISMO. 
al capitalismo? LA RENTA BÁSICA DE LAS IGUALES. 

JOSÉ IGLESIAS FERNÁNDEZ 



Básica 
de los 




CUADERNOS DE RENTA BASICA N° 10 

VARIOS AUTORES 



VIVIR DONDE QUIERAS. Estudio de viabili- 
dad de la Renta Básica de las Iguales en el 
municipio de Alfafar (País Valencia) 

VARIOS AUTORES (ENRIQUE GARCÍA Y 
MANOLO SAÉZ, coords.) 



LA RENTASASICAinMALES 



LA RENTA BÁSICA DE LAS IGUALES 
SEGÚN SAN PABLO 

JOSÉ IGLESIAS FERNÁNDEZ 



escribir para informar, leer para actuar 



Coordinación estatal de luchos o* f 

baladre, 30 años de lucha 

por el derecho a vivir dignamenl